29 nov 2011

Brasil: Ni juicio ni castigo


Por Atilio A. Boron / (OTRAMÉRICA)

Hace pocas semanas la prensa internacional informó que la presidenta Dilma Rousseff había finalmente dado vía libre a la creación de una Comisión de la Verdad para investigar las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la dictadura en la que, como se recordará, ella misma fue capturada como guerrillera, detenida y torturada.

Para sorpresa de muchos la Comisión investigará las violaciones a los Derechos Humanos ocurridas el período 1946-1985 en lugar de concentrarse en los años 1964-1979, que fueron aquellos en los que se perpetraron los crímenes más aberrantes. Además, la Comisión -y esto es lo decisivo- nació privada de la facultad para juzgar y castigar a los responsables de los crímenes.

Como lo señalara en una entrevista concedida al autor de esta columna por la profesora Anita Prestes, hija del legendario dirigente comunista Luiz Carlos Prestes, la Comisión tiene como misión esclarecer pero no podrá juzgar a los muchos torturadores que todavía actúan a la luz pública en Brasil, muchos de ellos inclusive en el ámbito de las instituciones estatales. Un dato revelador de los limitados alcances de la Comisión, que algunos pensaron emularía los avances registrados en la Argentina, surge del incidente ocurrido en ocasión de la ceremonia que sancionaría su creación el día 18 de Noviembre en el Palacio del Planalto, en Brasilia. Para esa ocasión la presidenta Rousseff habría querido -o al menos consentido- que hablara en representación de las víctimas de la represión la profesora Vera Paiva, hija del ex-diputado Rubens Paiva, uno de los primeros desaparecidos por la dictadura militar instalada luego del golpe de estado de Abril de 1964. Conocida la intención de la presidenta los tres ministros militares del gabinete presidencial manifestaron su más enconada oposición: si Paiva hablaba también debería hacer uso de la palabra un militar. Resultado: Paiva no habló y el brillante discurso que tenía preparado no pudo ser leído. Conclusión: la fundamental supremacía civil sobre las fuerzas armadas es todavía una peligrosa asignatura pendiente en la "democracia" brasileña.

La derecha y los militares brasileños argumentaron lo de siempre: "no reabrir heridas ya cicatrizadas" y que el proceso ya había sido cerrado con la sanción de la Ley de Amnistía de Agosto de 1979, que posibilitó el regreso de los exiliados al tiempo que arrojaba un espeso manto de olvido sobre las atrocidades cometidas en los años anteriores. Lo grave del caso fue que no sólo la presión militar hizo que Dilma tuviera que ceder ante las demandas castrenses: el Tribunal Supremo de Brasil se apresuró a ratificar la impunidad declarando que los alcances de la Comisión de la Verdad no podían transgredir los límites establecidos por la Ley de Amnistía. De este modo el "esclarecimiento" al que pueda llegar la Comisión se verá dolorosamente frustrado ante la imposibilidad de apelar a la justicia para castigar a los culpables. Se convierte en un ejercicio lindante con lo masoquista: se examina y comprueba el crimen hasta en sus menores detalles, pero al precio de reprimir el ansia de justicia que tensa el espíritu de los familiares y amigos de las víctimas. Vera Paiva podrá saber como capturaron, torturaron, mataron y desaparecieron a su padre pero al precio de renunciar a su derecho de enjuiciar y castigar a los culpables de su asesinato. Enésima comprobación de que no bastan las iniciativas "desde arriba", desde las alturas del estado: sin la pujanza de los organismos de derechos humanos la impunidad de los represores está garantizada. Así lo demuestra el caso que estamos analizando y, por la inversa, lo que ha venido ocurriendo en la Argentina.

"¿Qué pasará cuando los sacrificios no acaben con la crisis?"


Por Ana Flores/ Público

Entrevista a Ignacio Ramonet

"Director de la edición española de 'Le Monde Diplomatique'. Alerta del "golpe de estado financiero" que vive Europa".

La mundialización financiera ha creado su propio Estado. Un poder sin sociedad. Este rol es ejercido por los mercados (...). Las sociedades realmente existentes son sociedades sin poder. Y todo esto no deja de agravarse". Este texto tiene 14 años. En diciembre de 1997, Le Monde Diplomatique publicaba el editoral del director de su versión en español, Ignacio Ramonet, Desarmad los mercados financieros. Una alerta que sería germen del movimiento Attac, hoy presente en 40 países, que lucha por la creación de una tasa a las transac-ciones financieras mundiales (inspirada en la Tasa Tobin) para ir echando "granos de arena" en el engranaje de la especulación.

14 años después, dos países del Viejo Continente han visto cómo sus gobiernos elegidos en las urnas eran sustituidos por unos gestores de quiebras mientras el resto atribuye al mercado decisiones y recortes. Podría decirse que Ramonet, que participó esta semana en el ForoBurgos organizado por Banca Cívica, acertó.

¿Se cae Europa?


Es un momento extremadamente delicado. Da la sensación de que no hay a la cabeza una generación política a la altura de la crisis apocalíptica que estamos viviendo. Y no nos hemos sorprendido lo suficiente de que, en los últimos meses, Alemania y Francia hayan asumido un poder que nadie les ha dado. Hemos leído: Rajoy habla con Merkel'. ¿Lo primero que hace el vencedor de unas elecciones con un resultado abrumador es llamar al jefe? No estamos en un Estado federal. España no es Dakota ni Berlín, Washington. Pero manda Merkel con Sarkozy de coartada.

Hay quien dice que Merkel asume el liderazgo porque no hay otro poder fuerte.

Si Merkel es quien está pilotando la crisis, el resultado es muy malo. Grecia va cada vez peor. Su PIB es el 3% de la zona del euro. Cuando estalló la crisis, se podía haber solucionado con un pequeño esfuerzo económico. Ahora, la gangrena ha subido. Austria y Francia tienen triple A (máxima calificación en su deuda) y las atacan. No se sabe si el euro será capaz de resistir. A Portugal se le ha impuesto una cura de caballo, se le ha impuesto la recesión y como resultado, le acaban de volver a bajar el rating. Esto no funciona.

¿Tampoco para Alemania?


Los alemanes se van a despertar dentro de poco constatando que la mayoría de los países europeos no compran. Y que ellos no exportan.

¿Por qué no lo ven?


No están a la altura. Están aplicando recortes de manual a situaciones que no se corresponden. Están alentando a los mercados a seguir ejerciendo presión. Los mercados están desbocados porque durante años ha habido una desregulación que les dejó hacer lo que querían. Los políticos prometieron cambiarla en el G-20. Sarkozy prometió la tasa a las transacciones. Pero los mercados no quieren y no se adopta.

¿A qué nos enfrentamos?

Si seguimos así, la primera amenaza es que no estamos seguros de que el euro vaya a resistir. Nadie puede afirmar que seguirá siendo lo que es dentro de tres meses o de un año. Mucha gente apuesta por que desaparecerá o quedará restringido al área de influencia de Alemania.

¿Europa se ha convertido en la primera ficha de un nuevo dominó?

La crisis de la deuda europea puede tener incidencia a escala global. Muchos se han olvidado, entre ellos Alemania, de que la globalización es la articulación de todos los mercados. Si la zona euro entra en congelación por la austeridad, no se potenciará el consumo. Ya hay en Europa 23 millones de desempleados cinco millones en España y 80 millones de pobres, personas que no consumen. El mundo funciona con dos motores, dos grandes centros de consumo: EEUU y la Unión Europea, ambos amenazados por la recesión. Si se paran, China va a fabricar menos. De hecho, el ritmo de crecimiento chino ya ha bajado. Si China deja de importar, dejará de comprar también materias primas, los minerales que compra a Perú y Chile y los productos agrícolas que compra a Brasil y Argentina. Esos países dejarán de crecer. Y en 2013 o 2014 podemos encontrarnos con una recesión internacional.

¿Puede el mundo soportarlo?

La pregunta es, si la recesión se prolonga en Europa, hasta dónde soportarán las sociedades europeas la purga a la que se está sometiendo a la población. Cuánto va a crecer la extrema derecha, cuánto la protesta social. La historia no se detiene y esto es un golpe de Estado financiero. Los mercados han decidido tomar el poder. En Grecia e Italia, la evidencia es total. Se han colocado personas que han trabajado de uno u otro modo con Goldman Sachs, especialista en colocar a su gente en puestos de poder, pero ahora al frente de países.

¿Qué se puede hacer?

La sociedad debe reflexionar para seguir defendiendo que otras soluciones son posibles. Hay que volver a planteamientos keynesianos (estimular el crecimiento económico inyectando dinero público). No lo digo yo. Lo dicen (Paul) Krugman y (Joseph) Stiglitz. Hay que hacer políticas anticíclicas, encontrar soluciones para salir de la situación. Veo difícil que se adopten en el contexto actual pero, si los gobiernos no se deciden, vamos a la catástrofe. Quizás si Francia pierde la triple A, Alemania verá que se hunde la última barrera que los protege. Los eurobonos podrían ser una solución a la crisis de la deuda, pero por otro lado habría que prohibir los hedge funds (fondos de alto riesgo), implantar la tasa a las transacciones, no operar con bancos que utilicen paraísos fiscales. Quién lo va a hacer si no hay autoridad. El euro es la única moneda que no está respaldada por una autoridad política, no tiene Gobierno y los mercados se han dado cuenta, han visto que se podían enriquecer fácilmente.


¿Por qué arrasa la derecha en Europa si trae recortes aún mayores que los que se han visto?

Es posible que una parte de la sociedad, teniendo en cuenta que muchos medios de comunicación dominantes insisten en que la línea de la ortodoxia es la única, acepten la idea de los recortes. El pánico a que el euro desaparezca genera mucha disciplina. Se ha visto en Catalunya en estas elecciones. Una parte del electorado piensa que es o recortes o caos, y votan recortes. El problema es qué pasará cuando no pase nada. Cuando los sacrificios no hayan puesto fin a la situación de crisis. Esa es la preocu-pación.

¿Piden realmente los mercados ajustes y reformas, teniendo en cuenta que no funcionan?

Los mercados no saben lo que quieren. No hay un objetivo concreto. Buscan ganar dinero. Pero es posible que la especulación acabe por destruir el sistema.

26 nov 2011

Los desafíos de la educación popular


Por Frei Betto

En las líneas que siguen, expongo algunas inquietudes acerca de los desafíos que enfrenta la educación popular en la coyuntura en que vivimos. Son reflexiones que compartimos con Paulo Freire en sus últimos años de vida.

La deshistorización del tiempo

En la educación popular debemos aprender a colocar los conceptos en lenguaje plástico. Existe un principio sagrado: no se trata de que el pueblo entienda lo que hago, sino que “vea” lo que yo hago. Si no logramos transformar el concepto en metáfora, en imagen, seguiremos hablando un lenguaje ajeno y corremos el riesgo de llevar al pueblo a usar un lenguaje intelectualista. Un ejemplo de ello es el caso del carcelero que leía nuestras cartas en la prisión para censurarlas. Un día conversaba con nosotros y se quejaba de sus problemas sentimentales con su novia; al poco tiempo le pregunté cómo iban las cosas y me respondió: “Ay, hermano, el asunto está difícil, nos encontramos en un antagonismo”. Él había leído en nuestras cartas la palabra “antagonismo”, la encontró bonita y la incluyó en su lenguaje.

Otro principio de la educación popular es la necesidad de “tener un tendedero donde se puedan colgar los conceptos y analizar la realidad”. El tendedero es la percepción del tiempo como historia. Es un hecho que existen civilizaciones, tribus y grupos que no tienen la idea del tiempo como historia, como los antiguos griegos, para quienes el tiempo era cíclico.

La esencia del neoliberalismo es la “deshistorización del tiempo”. Cuando Fukuyama declaró “el fin de la historia”, no hizo sino expresar lo que el neoliberalismo quiere lograr: “hemos llegado a la plenitud del tiempo: el método neoliberal de producción capitalista, el mercado. Son pocos los escogidos y muchos los excluidos; y ya no tiene caso querer luchar por una sociedad alternativa”. Actualmente es difícil hablar de sociedad alternativa; de socialismo, ni pensarlo. Se ha creado una especie de pudor, un bloqueo emocional alrededor de este asunto.

La idea de que el tiempo es historia proviene de los persas, fue transmitida a los hebreos y acentuada por la tradición judaica. Es curioso que los tres grandes paradigmas de nuestra cultura sean judíos (Jesús, Marx y Freud) y que por lo tanto trabajaran con los conceptos tiempo e historia.

La perspectiva de Jesús es histórica. El Dios de Jesús es el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob; el concepto principal de la prédica de Jesús, el Reino, es la culminación de un proceso histórico. Otro ejemplo es el relato del Génesis, donde la creación del mundo aparece marcada por la historicidad del tiempo desde antes de la aparición del ser humano. En el caso del marxismo este no se puede entender sin profundizar en los modos de producción anteriores al capitalista y sin comprender cómo sus contradicciones pueden llevar a los modos de producción socialista y comunista. El análisis marxista supone el rescate del tiempo como historia. En el caso de Freud, cuando alguien se somete al psicoanálisis el psicoanalista le pregunta sobre su pasado, su infancia, su niñez. Toda su psicología es un rescate de nuestra temporalidad cono individuos.

El neoliberalismo está destruyendo la perspectiva histórica, por eso corremos el riesgo de hacer educación popular descolgando la ropa sin tener un tendedero. Ese tendedero a nuestra espalda, el tiempo en cuanto historia, es fundamental para que otros puedan visualizar el proceso.

Esto sucede también en la dimensión micro de nuestras vidas. ¿Por qué actualmente las personas tienen dificultad en tener proyectos de vida? ¿Por qué los jóvenes llegan al término de la educación media y no tienen idea del curso superior que desean estudiar, la carrera que quieren seguir, el rumbo que quieren dar a sus vidas? Cada vez abandonan más tarde la casa de los padres porque pierden la dimensión histórica; todo es “aquí y ahora”.

Lo que más favorece la deshistorización es la televisión. Nuestra generación es la última generación literaria, porque la literatura es narrativa y la narrativa tiene un comienzo, un medio y un final. El libro induce a la historicidad mientras que la televisión promueve la circularidad. Acaba con la idea de pasado, presente y futuro; comienzo, medio y final. Pongamos cono ejemplo cuando Ayrton Senna, corredor de autos, murió en un accidente: en una misma toma lo vemos siendo enterrado, recibiendo un premio y dándose un baño de champaña. Esto genera en la mente de las nuevas generaciones la idea de circularidad, nunca la temporalidad, y mucho menos de historicidad. Lo que fue puede ser, lo que puede ser ya fue, lo que sucede ahora no podrá ser después.

La televisión constituye un desafío para la educación popular. Aunque todo el sistema escolar se basa en la lectura de libros en cierto modo resulta anacrónico, porque no es suficiente educar a las personas para leer textos: necesitan ser educados para ver la televisión. En Brasil, por ejemplo, el promedio diario de asistencia a la escuela de un alumno de educación media es de cuatro horas, mientras que frente al televisor es de cuatro horas y media. El promedio europeo es de ocho horas en la escuela y, como máximo, tres horas frente a un televisor. Se requiere educar para ver la televisión, de manera que las personas logren un distanciamiento y, a partir de él, una percepción crítica de los programas que observan.


La concientización

La educación popular, tal como fue desarrollada en la obra de Paulo Freire, se basaba en dos paradigmas: el del personalismo cristiano y el marxista. Los dos paradigmas acuñaron una expresión que actualmente ya no está tan de moda: “concientización”.

El paradigma de la concientización debe discutirse con más profundidad porque las personas, incluyéndonos a todos, no hacemos exactamente lo que consideramos verdadero ni lo que pensamos. Hacemos lo que queremos, y muchas veces queremos lo que no pensamos, o pensamos una cosa y hacemos otra. Esto no significa que corramos el riesgo de nunca acertar. El problema es que con mucha frecuencia formamos líderes “concientizados” que, sin embargo, en las instancias de poder, establecen relaciones opresivas y burguesas. Es muy difícil formar verdaderos líderes.

Paulo Freire enfatizaba las dificultades para “educar permanentemente al educando y al educador”. El educador se educa a partir del educando, pero puede o no dejarse reeducar. En general tendemos a no dejar que nos cuestionen. En la práctica de la educación popular, en nombre de una educación y una metodología liberadoras seguimos con prácticas “bancarias” y colonizadoras. Pensamos que vamos a cambiar la forma de pensar del educando en lugar de partir de él. Partir del educando es la única manera de partir de la experiencia del grupo.

Tenemos el vicio de ser direccionistas en nombre de la educación popular. La educación popular es como la gimnasia: si dejas de practicarla, engordas, te vuelves flojo; es la gimnasia del espíritu pedagógico, no puede detenerse.

Los nuevos paradigmas

La educación popular debe trabajar los nuevos paradigmas: la dimensión holística de la realidad; la dimensión ecológica; las relaciones de género, sexualidad, afectos y subjetividad; la relación de lo micro con lo macro.

“Dimensión holística”. Holos es una palabra griega que significa totalidad. Es necesario tener presente que el educando, así como el educador, es un ser en totalidad, en sus relaciones, en sus contradicciones, dotado de razón y emoción. Es un ser que tiene relaciones que rebasan el análisis político, cartesiano, explícito, conceptualmente correcto y definido. Esa red de relaciones debe ser tomada en cuenta en el proceso educativo. Existe un vínculo indestructible entre los seres humanos y la naturaleza, entre nosotros y el cosmos.

“Dimensión ecológica”. El aspecto ecológico es una navaja de dos filos. Existe la forma burguesa de enfrentarlo y la manera libertadora. El gran legado del líder seringueiro Chico Mendes consiste en entender que todo lo que acontece en la naturaleza influye en la vida humana, así como lo que ocurre en la vida humana influye en la naturaleza.

El reto es estudiar cómo se da la relación con la ecología. No se trata de defender a los delfines del golfo Pérsico o las ballenas de Alaska olvidando los niños del noreste de África. De hecho, el animal más amenazado por la extinción es el ser humano.

La bandera de la ecología es revolucionaria porque la ecología es como un avión: aunque haya primera clase, clase ejecutiva y clase turista, a la hora de caer no hay distinción, todos pueden morir. Comprenderlo así nos permitiría reformular también la idea de aliados políticos. En ocasiones limitamos el abanico de aliados por no sentir que hay demandas que exigen respeto a la vida tanto de las clases dominantes, como a la nuestra, como el medio ambiente, que afecta igualmente a ricos y a pobres. Podríamos movilizar a todo un sector de la sociedad que, por nuestros prejuicios, está siendo movilizado por nuestros enemigos de clase. Por prejuicios paradigmáticos dejamos a ciertos sectores importantes de la sociedad en manos de los que quieren perpetuar el sistema, y no de los que quieren cambiarlo. Esto es así porque no trabajamos la dimensión liberadora de los paradigmas.

“Subjetividad”. Actualmente en los procesos de educación popular ya se discuten aspectos subjetivos y de sexualidad, aunque no tanto como sería deseable. Está demostrado que a medida que se habla menos de determinados temas se cometen más errores. En las escuelas no se hablaba de sexo ni de política y en ellas se hicieron y se hacen muchas tonterías.

La discusión debe enfocarse hacia cuáles son los nuevos paradigmas de la educación popular, o bien, cómo desarrollar una metodología y una teoría de la educación popular incorporando el legado de Paulo Freire y haciéndolo avanzar. Este es un desafío que enfrentamos todos nosotros.

“Lo micro y lo macro”. El aspecto de lo personal y lo social, de lo micro y lo macro, de lo particular y lo general, de lo local y lo global, genera nuevos paradigmas sobre los que debemos pensar en el marco de la educación popular; de lo contrario se corre el riesgo de acertar en lo particular y seguir en otra dirección con respecto a lo general.

La crítica y la autocrítica

Otro de los desafíos de la educación popular es volver la crítica y la autocrítica una práctica fundamental, y esto nos lleva a afirmar que no se puede hablar de educación popular sin que haya transparencia en la actuación de los miembros del equipo. La educación popular exige escuchar a los educandos y al equipo sobre lo que piensan del educador, de su desempeño. Tendemos a pensar que todo está bien y vamos aplazando los problemas. Es ahí cuando las cosas se detienen.

La educación formal

Aunque no es posible adoptar en la escuela formal la metodología de la educación popular, sí es posible incluir en aquella algunas pedagogías de la educación popular, o crear una escuela con la metodología de la educación popular.

Esta imposibilidad es válida para otros espacios de la reproducción del sistema. En general son espacios positivos en sus objetivos inmediatos y, por lo tanto, necesarios, como los consejos tutelares, la atención a los niños, proyectos de salud, etcétera.

Como ya no tenemos una visión apocalíptica de la sociedad, no vamos a dejar de adoptar algunas iniciativas con la justificación de que “eso o aquello solo se podrá lograr en una nueva sociedad”. Hemos descubierto que lo nuevo se hace ahora, y a través de la acumulación de lo nuevo vamos acabando con lo viejo. A través de etapas y de nuevas iniciativas conseguiremos conquistar adhesiones, y así enfatizar las contradicciones y posibilitar, en el futuro, un cambio de la sociedad.

El problema de la escuela es ser esclava de una cronología curricular con la cual la educación popular es incompatible porque esta depende del tiempo de los educandos y no del tiempo del plan de estudios. El desafío está en conseguir inventar una escuela que no esté atada al control de instituciones gubernamentales. Introducir otra dinámica en la escuela formal es posible pero no será fácil. Fernando Cardenal, ministro de Educación en la Nicaragua sandinista, tenía una propuesta de reforma educativa interesante que no se logró debido a la agresión de EE.UU. Su propuesta acababa con el plan de estudios, rompía la coincidencia entre el avance escolar y la cronología anual de manera que un campesino podría cursar el sexto grado en seis meses o en seis años, dependiendo de “su tiempo”. La propuesta rebasaba el criterio de vencedores y de vencidos. Nadie era obligado a realizar exámenes a fin de año para pasar al siguiente nivel.

Existe una serie de innovaciones pedagógicas, pero son solo una gota de agua en el océano de un sistema escolar preso del plan de estudios y de la tradición. En Kenia, África, existe una experiencia educativa que procura adecuar el pensamiento con la acción. Aunque no pretende ser educación popular es un paso con respecto al cual nuestra educación está a muchos años luz. Uno de los requisitos de esta escuela es que cada alumno pase una semana del año conviviendo con trabajadores para permitirles entender cómo se articula la ciudad desde abajo. Algunos salen de madrugada con los barrenderos para recoger la basura, otros permanecen una semana como auxiliares de enfermería en un hospital público, etcétera.

En la escuela brasileña las personas pasan más de 20 años en los escritorios escolares, salen con un certificado, pero no saben cocinar, coser, planchar ropa, cuidar la casa, arreglar un aparato electrodoméstico, no entienden de mecánica, de automóviles o de carpintería. Nunca debaten aspectos como pérdida, ruptura, afectos, sexualidad, muerte, dolor, espiritualidad. Nuestra escuela no trabaja temas fundamentales.

Los excluidos

Cada vez un número mayor de sectores populares se enfrenta a su supervivencia inmediata, y cuando una persona se encuentra en esa situación no tiene tiempo ni condiciones psicológicas para participar en reuniones, entrenamientos o encuentros.

Este es un factor que complica nuestro trabajo. No sirve trabajar con personas que se encuentran en la miseria. Nadie logra movilizar a una persona que está preocupada por la comida de cada día. Es importante buscar sectores en los cuales, estratégicamente, se compensa la inversión de nuestro trabajo. Esto no significa que vayamos a dejar de trabajar con los que viven en las calles, como los que se alojan debajo de un puente o con un niño con SIDA. Sin embargo, debemos tener claridad, dentro de un proceso social más amplio, acerca de dónde invertir en la formación de nuevos líderes populares.

El trabajo de base consiste actualmente en lograr atraer a los sectores excluidos y proporcionarles un mínimo de organización para, a partir de esa organización, posibilitar la movilización. Contar con un trabajo de base debería constituir un criterio para todo educador.

Los afectos

En nuestros días el aspecto de los afectos se está discutiendo más. Los líderes formados mediante la educación popular están mostrando, con su práctica, cómo lo afectivo influye en el desempeño político. Cuando no eran líderes, no tenían responsabilidad pública, podían vivir sus problemas afectivos porque ello afectaba, cuando más, a la familia. Ahora afecta estructuras e instituciones. Discutir el asunto del amor, en su dimensión personal y social, es romper un tabú, significa colocar al amor cono la condición para vivir en una sociedad donde las personas son diferentes sin ser necesariamente contrarias. Queremos crear una sociedad amorosa.

Recomendaciones para la acción

1.Hacer educación popular implica tener siempre como referencia el tiempo como historia. Esto es lo que nos permite analizar los procesos educativos y hacerlos visibles para otros. Siendo la televisión un elemento clave en la destrucción de la perspectiva histórica es necesario promover una educación para ver la televisión, que le permita a las personas el distanciamiento necesario para ser críticos frente a los programas que observan.

2.La educación popular requiere que el educador se cuestione, se eduque permanentemente en el diálogo con los educandos. Partir del educando es la única manera de partir de la experiencia del grupo, de lo contrario tendremos una educación popular conceptualmente liberadora, pero colonizadora en la práctica.

3.Debemos enfocar la discusión acerca de los nuevos paradigmas de la educación popular, rescatando su dimensión libertadora, para desarrollar una metodología que incorpore el legado de Paulo Freire y lo haga avanzar.

4.Aunque no es posible adoptar en la escuela formal la metodología de la educación popular, sí es posible incluir, en aquella, algunas pedagogías de la educación popular o crear una escuela con la metodología de la educación popular. Lo nuevo se hace ahora, y a través de la acumulación de lo nuevo vamos acabando con lo viejo. A través de etapas y de nuevas iniciativas conseguiremos conquistar adhesiones para posibilitar, en el futuro, un cambio de la sociedad.

5.La dinámica de la educación popular busca el cambio social y, por lo tanto, debe saber invertir en los sectores donde haya personas que tengan el potencial de multiplicadores. Ellos, a su vez, ayudarán a la formación de los que trabajan directamente con sectores excluidos.


Traducción: Dora Benveniste Levy

Tomando de:http://codigosur.net/article/1 Fuente original: http://www.lajiribilla.cu/


MÁS FORMACIÓN POLÍTICA, MENOS TELE


Por  Mónica Saiz/ Correo del Orinoco

Dando clases de formación política, siempre buscamos que los participantes comprendan la importancia de contrarrestar la dominación ideológica imperialista sobre la población.

Para comprobar la magnitud de la manipulación de las conciencias en la sociedad actual, preguntamos a los participantes: ¿Ustedes han visto películas de la guerra Vietnam? Sí, contestan todos. ¿Y quién ganó? Estados Unidos, contesta la mayoría.

Reflexionemos. Las películas yanquis sobre Vietnam nunca dicen que Estados Unidos ganó la guerra. Pero tampoco dicen que la perdieron. Por otra parte, jamás hemos visto una película vietnamita sobre la guerra. En las películas yanquis, los vietnamitas aparecen como seres insignificantes y oscuros, los protagonistas y héroes son los soldados norteamericanos. Conclusión: los yanquis ganaron. Sutil y extraordinario método para tergiversar los hechos y manipular las conciencias.

Imaginarán la sensación de asombro de los confundidos, cuando se enteran que ganaron los vietnamitas. Primero, porque no se les había pasado por la cabeza que los vietnamitas hubieran vencido. Segundo, porque se dan cuenta del engaño en el que estaban.

Este es uno de los tantos recursos que utilizamos para explicar por qué todo lo que sabemos merece ser analizado y criticado, demostrando aquello de que las ideas dominantes responden a los intereses de las clases dominantes.


Mediante la formación política podemos destruir los pilares sobre los cuales se ha construido el aparato ideológico de las clases dominantes. La ideología dominante es un gigante con pies de barros, porque está sostenida en la mentira y el ocultamiento.

Sospecho que muchos lectores del Correo del Orinoco que sí sabían la respuesta correcta, estarán doblemente sorprendidos, preguntándose: ¿Cómo puede ser que alguien no sepa que Vietnam ganó la guerra? ¿Quiénes serán los alumnos de estos cursos?
Los invito a que hagan la prueba entre sus allegados, compañeros de trabajo, familia, vecinos, amigos, como una forma de comprobar el nivel de manipulación ideológica que los rodea.

Caracas

24 nov 2011

Participación ciudadana, ¿qué falta?


Escrito por José E. Rivera Santana / Copresidente MINH


Una intensa actividad de reflexión ha ocurrido en Puerto Rico en los pasados 15 años. En muchas de ellas he tenido la oportunidad de participar, en ocasiones como conferenciante o panelista, en otras como uno más de los asistentes.

Fui testigo del esfuerzo exitoso organizado desde el movimiento sindical y que produjo cuatro cumbres sociales de una admirable calidad, tanto por las deliberaciones como por la amplia participación de sectores. Destaco como significativo la inclusión, en un mismo espacio, de sectores con profundas diferencias, como ocurrió en la última Cumbre en la que dialogaron, frente a frente, los portavoces principales de la industria de la construcción y los de los grupos y organizaciones ecologistas. Los resultados fueron altamente valorados por todos los participantes, al igual que las recomendaciones y conclusiones que en general produjeron las deliberaciones. Otras iniciativas, como el Foro Social celebrado en el 2006, han tenido resultados parecidos o de mayor impacto.

Más recientemente, resulta significativo y esperanzador el esfuerzo de los Foros Ciudadanos auspiciados por este periódico. Su organización científica, la amplia participación, la calidad de los análisis y las cientos de propuestas expresadas con confianza y de formas diversas constituyen, a mi juicio, un enorme banco de ideas y de respuestas de las cuales no escapa tema o problema de nuestra realidad que no haya sido considerado, como la educación, la salud, la seguridad, la economía, la ecología, entre tantos otros.

Podríamos afirmar que, gracias a estos espacios de diálogo, nuestro País tiene en su gente, sus pensamientos y sabiduría un diagnóstico que en algunos asuntos es consenso con una incuestionable claridad. Esto resulta alentador, pues es un mentís a la supuesta división entre los puertorriqueños utilizada como argumento -sobre todo repetido ad náuseam por muchos políticos- para justificar la inacción en temas medulares o para menospreciar la participación ciudadana y lo que de ella pueda surgir. Basta mirar el resultado de la gestión legislativa para percatarse del enorme divorcio con lo que piensa la ciudadanía, como bien se desprende de lo expresado en los Foros Ciudadanos.

Las preguntas son obligadas, ¿qué pieza falta? ¿Por qué los partidos políticos, cuando ganan las elecciones, no ponen en práctica las recomendaciones ciudadanas, algunas contenidas en sus programas?

A manera de ejemplo, el Plan de Usos de Terreno ha sido un reclamo permanente desde principio de la década pasada, los políticos de todos los colores se han comprometido a hacerlo y todos los que han tenido en sus manos la oportunidad han incumplido vergonzosamente. ¿Por qué?

Llenado el espacio de deliberación y diálogo, la ciudadanía necesita ocupar el espacio del poder y arrebatárselo a los que con demagogia y peroratas politiqueras se creen dueños de lo que no les pertenece. Quienes han administrado el gobierno están ahí porque forman parte de unas maquinarias partidistas que son la antítesis de la participación democrática y de los reclamos consensuados. De esas maquinarias se alimentan personajes de claro perfil delictivo y, lo que es peor, organizaciones y empresas que aparentan un “glamour prestigioso”. Sabido es que las enormes aportaciones económicas que realizan los que de ellas disponen, a las campañas de los partidos llamados de mayoría, llevan el signo de lo que esperan como recompensa. Es decir, la gestión pública se compra durante el periodo electoral por quienes tienen esa capacidad.

La ciudadanía necesita romper ese monopolio del poder político para ver realizado el resultado de sus reflexiones, diálogos y consensos. El diagnóstico se ha hecho.

21 nov 2011

El pensamiento de Hostos entre 1898-1903


Escrito por Alejandro Torres-Rivera / MINH

Los temas de la libertad política, la soberanía y la libre determinación como afirmación de dignidad individual y colectiva, fueron abordados por Hostos en sus escritos de finales del siglo XIX y principios del siglo XX al plantearse la necesidad del rescate de la personalidad jurídica del pueblo puertorriqueño.

Perspectivas hostosianas en los temas de la libertad política, soberanía y libre determinación: comentarios libres

«Las revoluciones son tanto más necesarias
cuanto mayor sea la pasividad de los pueblos
antes de la revolución y mayor la ingratitud
que después de ella se prevea.1»

Introducción:

Primero que todo, agradezco la invitación cursada por la profesora Vivian Auffant, Coordinadora de este Simposio, para presentarles una breve reflexión en el tema que nos corresponde. Mis saludos particulares y mi mayor respeto para los ponentes en este evento. Mi especial saludo a todas aquellas personas que en las diferentes actividades llevadas a cabo a lo largo de los pasados días han compartido este espacio común evocando el pensamiento y legado de Eugenio María de Hostos.

Nos corresponde en la tarde de hoy como parte del Simposio titulado «Pertinencia del Pensamiento de Eugenio María de Hostos en el Siglo XXI», abordar la Perspectiva Hostosiana en casos contemporáneos. Por razones de tiempo y prudencia, limitaré mi intervención a la propuesta hostosiana para la solución de las relaciones políticas entre Puerto Rico y Estados Unidos y su vigencia en Siglo XXI.

El Diccionario de la Lengua Española, Vigésimo segunda Edición, (2001), define la palabra contemporáneo como lo existente en el mismo tiempo que otra persona o cosa; lo perteneciente o relativo al tiempo o época que se vive. En la búsqueda de sus sinónimos, la palabra contemporáneo nos refiere a lo actual, lo coetáneo, al presente, a lo que ocurre de manera o forma simultánea a un evento determinado.

Los temas de la libertad política, la soberanía y la libre determinación como afirmación de dignidad individual y colectiva, fueron abordados por Hostos en sus escritos de finales del siglo XIX y principios del siglo XX  al plantearse la necesidad del rescate de la personalidad jurídica del pueblo puertorriqueño. Sus análisis, a la distancia de más de cien años, siguen siendo bastiones teóricos en las luchas actuales por nuestra emancipación política y la reivindicación de nuestros derechos soberanos conculcados por Estados Unidos de América. En ese sentido, el pensamiento de Eugenio María de Hostos sigue contando con plena vigencia en nuestra lucha emancipadora para el Siglo XXI. Para comprender tal vigencia, sin embargo, es necesario detenernos a examinar sus raíces históricas.


Antecedentes históricos para una reflexión:

El Partido Revolucionario Cubano fue fundado por José Martí, Apóstol de la Independencia de Cuba, el 5 de enero de 1892. Posteriormente, el 28 de febrero de 1892, se funda en Nueva York la Sección Puerto Rico del Partido Revolucionario Cubano. En sus Estatutos, aprobados el 10 de abril de 1892, Martí consignó que dicho Partido se constituía «para lograr con los esfuerzos reunidos de todos los hombres de buena voluntad la independencia absoluta de Cuba y fomentar y auxiliar la de Puerto Rico.2»  De esta manera quedaba sellado un compromiso histórico, regado con la sangre derramada en los campos de batalla por cubanos y  puertorriqueños a partir del Grito de Yara el 10 de octubre de 1868, en lo que fueron la Guerra Larga, la Guerra Chiquita y la Guerra de Independencia.

En apoyo a la lucha emancipadora del pueblo cubano dijeron presente en forma desprendida cientos de puertorriqueños que fueron a pelear contra el colonialismo español en la manigua cubana. También, desde otra dimensión de la lucha, insignes patriotas rindieron  extraordinarios servicios en el exterior a la causa de la independencia de Cuba y de las Antillas. Tales fueron los casos, por solo mencionar dos de los más destacados, los puertorriqueños Ramón Emeterio Betances y Eugenio María de Hostos.

La ausencia de condiciones inmediatas en Puerto Rico para la lucha armada luego del Grito de Lares el 23 de septiembre de 1868, lleva a puertorriqueños comprometidos con la independencia de Puerto Rico y la de Cuba a desplazarse a los campos de batallas del hermano país. La posibilidad del triunfo de la guerra de independencia en Cuba a partir de la fundación del Partido Revolucionario Cubano, junto con el compromiso de auxiliar la de Puerto Rico, acentuarían el vínculo continuo a lo largo de cuatro décadas entre revolucionarios de ambos países.

El 30 de mayo de 1875, estando en pleno desarrollo en Cuba la llamada «Guerra Grande», Hostos se reunió con Betances en Puerto Plata para coordinar esfuerzos en las luchas de independencia de Cuba y Puerto Rico. Luego de trasladarse a Santo Domingo, junto a revolucionarios cubanos y dominicanos y a través del periódico Las Dos Antillas, el cual también circularía bajo los nombres de Las Tres Antillas y El Antillano, continuará su labor en favor de la causa de la independencia de Cuba y Puerto Rico. La falta de voluntad política en Puerto Rico para un levantamiento armado revolucionario en aquellos años lleva a Betances a regresar a Paris y a Hostos a Nueva York, desde donde iniciará un segundo peregrinaje por tierras suramericanas recabando apoyo para la independencia cubana.

De regreso a Santo Domingo, Hostos permanece en este país entre 1880 al 1888, cuando decide viajar a Chile.

La guerra desatada nuevamente en Cuba en 1895 bajo la dirección del Partido Revolucionario Cubano, plantea nuevos escenarios para los patriotas puertorriqueños. La profesora Loida Figueroa Mercado nos indica que este evento creó una gran expectación en Hostos, reanimando de inmediato «su labor en favor de la causa3».

El avance de la lucha en Cuba y la proximidad de un triunfo independentista que más adelante avivara la llama de la lucha independentista en Puerto Rico, forma parte de las razones para Estados Unidos intervenir en el conflicto armado declarando la guerra al Reino Español.

Ante la gravedad que planteaba la entrada de Estados Unidos en el conflicto, el 7 de junio de 1898 Betances escribe a Hostos una carta procurando su regreso desde Chile para integrarse en forma más directa y protagonista en los acontecimientos que se avecinaban. En ella Betances le indica:


«Querido Hostos: ya debe usted haber llegado a esta fecha al centro de operaciones. (Cuánto me alegro!

Por desgracia yo estoy también muy lejos y por mil razones no puedo hacer como usted. Conviene mucho que usted esté ahí y que, como yo, haga presión todo lo posible sobre Henna para que se mueva hasta obtener para Puerto Rico las mismas concesiones, siquiera, que se hacen para Cuba...

He perdido mi tiempo queriendo abrir los ojos a los políticos españoles, para que tratásemos directamente sobre la base de nuestra independencia lo que hubiera impedido la intervención yankee y habría sido aceptado por el pueblo. No ha sido posible hacerles comprender esta necesidad, que les habría conservado nuestras simpatías y ventajas comerciales, además de una indemnización.
...4»

En esta misma carta Betances llama su atención al hecho de que Henna, quien dirigía la Sección Puerto Rico del Partido Revolucionario Cubano en la ciudad de Nueva York, perseguía que la Isla saliera de manos de España para entregarla a Estados Unidos. A tenor con lo anterior, le propone que «dos o tres formasen en comisión, ponerse de acuerdo a la voz con el gobierno yankee y hablar bien claro; esto es decir la verdad: Puerto Rico no quiere pertenecer a la Unión. Está resuelto a resistir. Esto puede producir desastres irreparables...» Finalmente en la carta, le indica que es la «independencia absoluta» la que puede salvarnos.

Las gestiones hechas por Betances parecen ser corroboradas por Hostos en una carta escrita en el mes de junio de 1898 a su amigo dominicano Federico Henríquez y Carvajal. En ella nuestro patriota le expresa:

«Es posible que asuntos patrios me lleven por tiempo dado a Nueva York...5»

De hecho, más adelante, será en otra carta de 6 de julio de 1898, donde Hostos indicará a su amigo el propósito de su viaje.

«Aunque uno de mis móviles, al hacer el sacrificio de salir de Chile, fue acercarme a las Antillas y trabajar por ellas, no pensaba en que tendría que hacer el sacrificio que mañana empezaré a imponerme, dejando por primera vez a mi familia. Con efecto: comisionado por cubanos y puertorriqueños (solo usted y Peynado que lo sepan), saldré mañana para Nueva York. A usted, a quien tanto debe en nobles esfuerzos y simpatías la causa de la independencia, le toca ahora hacer votos eficaces por conseguir que su amigo salga bien de su propósito.6»


[1] De Hostos, Eugenio María, Obras Completas, Edición Crítica, Diario I, página 118.
[2] Martí, José, Obras Completas, Tomo 1, página  279, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1975.
[3] Figueroa Mercado, Loida, Síntesis biográfica de Eugenio María de Hostos y Bonilla, en su libro Hostos: ensayos inéditos, Editorial Edil, 1987, páginas 17-18.
[4] Ramón Emeterio Betances, Casa de las Américas, Cuba, páginas 371-372, 1983.
[5] De Hostos, Eugenio María, Obras Completas, Cartas, Tomo IV, página 195, (1969).
[6] De Hostos, Eugenio María, Obras Completas, Cartas, Tomo IV, página 196, (1969).

Camila Vallejo: La primavera chilena llegó para quedarse


Enrique Ubieta Gómez/ La Calle del Medio

Es la segunda mujer en la historia de Chile, su país, en ser elegida como presidenta de la Federación de Estudiantes (universitarios). Militante de la Juventud Comunista, graduada de Geografía, Camila es a sus 23 años, una joven que rompe todos los esquemas. La derecha ha tratado de resaltar su indudable belleza física, y de atraerla al redil del buen comportamiento. Lo tiene todo para «triunfar», dice hipócritamente. Ella no se deja. «Es común que desvíen la atención de los temas de fondo planteando cuestiones superficiales como prioritarias.

Objetivamente soy bonita y no tengo problema en decirlo, pero yo no decidí cuál iba a ser mi apariencia. Lo que sí decidí es cuál es mi proyecto político y mi trabajo con la gente» –respondía a una revista chilena del «corazón», que apuntaba también algunas de sus preferencias musicales: la trova, Serrat, Chinoy, Ismael Serrano.

Y ya que los medios no pueden cooptarla, entonces tratan de reducir el alcance social del movimiento al liderazgo (perverso u oportunista) de una persona, para luego demonizarla. Sobre este tópico respondía también: «La personificación del movimiento se debe a los políticos y los medios de comunicación. Es una estrategia que se utiliza muy frecuentemente con los que se levantan con reivindicaciones sociales. En Chile se aplica mucho, y creo que en otros países del mundo también. En Cuba se habla de castrismo, en Venezuela de chavismo. Todo se personifica con los supuestos líderes, y no se ve que es un proceso compartido por mayoría» (BBC Mundo).

Camila participó en la llamada «Rebelión de los Pingüinos» en 2006 (los estudiantes secundarios chilenos reciben ese sobrenombre por el uniforme negro y blanco que usan), y es la vocera de las actuales protestas contra el modelo neoliberal en la educación universitaria, un movimiento estudiantil que ha sacudido a toda la sociedad chilena. Aunque parte de iguales premisas –la resistencia al modelo privatizador y la necesidad de construir un mundo alternativo–, el chileno se diferencia de otros estallidos aparentemente similares, como el de Madrid o el de Nueva York: «El movimiento estudiantil chileno no parte de los indignados –ha dicho Camila a BBC Mundo–. No es un movimiento espontáneo, sino un proceso largo basado en un análisis profundo de lo que sucede en Chile, de la injusticia. Entendemos la lucha de los indignados, pero en Chile pasamos la etapa del descontento. Ahora, hay que mirar enfrente y construir una alternativa para el país.» A pesar de su intensa agenda movilizativa, Camila Vallejo accedió a responder en exclusiva las preguntas que La Calle del Medio le hizo llegar para los lectores cubanos.

Algunos «expertos» solían decir en los 90 que las nuevas generaciones de chilenos –después de años de dictadura–, eran conformistas, pasivas, individualistas, ¿este renacer de los movimientos sociales juveniles en Chile es inesperado?


Efectivamente, gran parte de la juventud durante mucho tiempo asumió el rol que el modelo noeliberal le quiso imponer, actuando de manera absolutamente conformista y desconectada de la realidad nacional y de lo que ocurría en la política o en el mundo social, sumado al temor inculcado de manifestarse públicamente, a causa de las fuertes amenazas de represión que el gobierno aún desata sobre la población. Sin embargo, en Chile también tenemos una vasta historia de lucha social, de la cual los jóvenes constantemente han sido una parte activa y dinamizadora, aunque durante mucho tiempo eso se dio a contracorriente. Sin embargo, este año la necesidad y deseo de manifestarse, de participar y exigir un espacio en la toma de decisiones caló muy hondo en la juventud, lo que aportó el inédito elemento de la masividad en las movilizaciones, desbordando lugares públicos como nunca antes se había visto en el país. Eso es nuevo y muy esperanzador, ya que parece ser que aquella juventud individualista está dejando de lado ese tipo de actitudes y está entendiendo que todos estamos llamados a realizar cambios y a trabajar por construir un futuro mejor para nuestro país. Entonces así nos damos cuenta que en realidad muchos jóvenes tienen una opinión, que no estaban manifestando, pero que estaban esperando la ocasión para dar a conocer.

Eres parte de una generación con varias experiencias movilizativas, desde los días de la llamada «Rebelión de los Pingüinos» en 2006, ¿cuanto ha madurado el movimiento estudiantil en Chile?; de aquella primera experiencia, ¿qué enseñanzas supo sacar?

En primer lugar, algo que constantemente se destaca respecto de las diferencias y aprendizajes del movimiento de los Pingüinos del 2006 es el sentido amplio y ciudadano del actual movimiento. Es decir, ahora asumimos que los cambios en educación se realizarán por la acción conjunta de múltiples organizaciones sociales capaces de aunar sus fuerzas en favor de nuestro objetivo, y no sólo con el actuar aislado de los estudiantes, pues, dichos cambios son una preocupación nacional, y no sólo gremial, como se quería creer en años anteriores.  Por otro lado, en cuanto a la experiencia acumulada respecto de la relación entre los gobiernos y el mundo social, nosotros ya aprendimos que la unidad y la movilización son dos herramientas indispensables al momento de actuar, pues la derecha siempre buscará dividirnos de modo que seamos los mismos estudiantes quienes nos dividamos en torno a debates innecesarios. Además, ahora sabemos que ante cualquier ofrecimiento del gobierno debemos exigir garantías que nos permitan tener un mínimo nivel de confianza para iniciar las conversaciones que nos lleven a solucionar cualquier conflicto. Por eso hoy el diálogo está paralizado, a causa de la intransigencia del gobierno y su incapacidad para ceder ante mínimas solicitudes. Sin embargo, seguimos movilizados, pues no nos detendremos hasta ver resultados concretos, lo cual constituye otro aprendizaje: no bajar los brazos antes de tiempo.

Las transnacionales de prensa siguen hablando del «milagro económico chileno», ¿cómo viven los estudiantes ese «milagro»?


Lamentablemente, lo que algunos llaman milagro, para muchos fue y sigue siendo una pesadilla. Tanto en el sentido político más duro de lo que significó la dictadura en Chile y las vidas que cobró para implantar el actual sistema neoliberal, como en el sentido económico, en cuanto a las violentas transformaciones que sufrió nuestra economía e incluso nuestro Estado, a fin de perpetuar negocios millonarios para algunas pocas familias de este país, a costa del empobrecimiento y  creciente desigualdad en la distribución de la  riqueza para la mayoría de la gente, además de afectar los servicios públicos que se vieron privatizados casi en su totalidad, desde el agua hasta la salud y la educación. En este sentido, a las universidades existentes hasta el momento del golpe de estado se les quitó casi el 70% de financiamiento y debieron comenzar a cobrar altos aranceles para poder autofinanciarse a través del pago de las familias, lo cual hizo que el ingreso a la educación superior estuviera determinado por el nivel económico de los estudiantes. Además, en ese momento se permitió la creación de universidades e institutos técnicos privados cuya intención principal era lucrar y no educar, lo que provocó la proliferación de cientos de establecimientos de baja calidad, que lucraban con los sueños de progreso de familias completas. A eso hay que sumarle que las escuelas públicas también se empobrecieron y que se permitió la creación de escuelas con "financiamiento compartido o subvencionado", en los que se les permite a privados abrir colegios y recibir dineros del estado y de las familias para sostener tanto la escuela como el bolsillo del dueño, lo cual debilitó gravemente la educación pública y significó que las personas más pobres sólo pudiesen acceder a una educación de baja calidad que no le permite entrar a la universidad ni mejorar su condición de vida. Frente a todo eso es que hoy nos rebelamos como estudiantes y como sociedad en general, presentando nuestras demandas, reflejo de una concepción social de cómo debería ser la educación en Chile.

Por las consignas que los estudiantes enarbolan, es evidente el regreso de Salvador Allende, de sus sueños truncos, ¿los jóvenes chilenos empiezan a revalorizar el pasado?, ¿cómo sería el Chile de sus sueños?


No podría asegurar que sucede en todo el movimiento, pero creo que entre muchos integrantes del movimiento hay una alta valoración de Allende como el único Presidente que llevó a cabo un proyecto popular de gobierno. Eso es algo muy emotivo, pues ahí se produce un punto de encuentro entre las nuevas generaciones y las generaciones pasadas, que vivieron aquel hermoso esfuerzo de construir la vía chilena al socialismo, brutalmente coartado por la dictadura. Sin embargo, aquellos gestos que nos permiten recordar, reflejan a la vez la actual necesidad de tener un gobierno ligado estrechamente a la gente, que lleve un programa ciudadano y no funcional a los grandes conglomerados de poder nacionales y trasnacionales que hoy dominan el país. En ese sentido, más allá de tan sólo revalorizar el pasado, yo creo que hoy somos parte de la construcción de un futuro distinto, a cargo de presentar un proyecto social para la educación y para todas las otras necesidades con las que carga nuestro país. Esto, claramente involucra a todo tipo de actores, desde los estudiantes a los trabajadores, pobladores, dueñas de casa, etc. quienes tenemos el deber de no abandonar este proceso que está en ascendencia, lo que hoy llamamos «La Primavera del Pueblo de Chile», que con justa razón estamos fortaleciendo, pues llegó para quedarse.

¿Han recibido el respaldo de otras federaciones latinoamericanas de estudiantes? La Federación de Estudiantes Universitarios de Cuba también emitió un comunicado de solidaridad, ¿se sienten parte de un movimiento continental?


Afortunadamente el apoyo internacional proveniente de jóvenes de todo el mundo ha sido incondicional y muy gratificante; nos ha permitido conocer el alcance de lo que pasa en Chile y a la vez nos ha abierto numerosas puertas de solidaridad internacional. Hemos aprendido de la experiencia de muchos compañeros alrededor del mundo y de América Latina, hemos intercambiado apreciaciones y conocimientos tanto de educación como de las vivencias en los movimientos sociales, principalmente a través de instancias de comunicación como lo son las redes sociales, pero también de manera concreta, como sucedió en el CLAE, congreso al que asistieron cientos de compañeros chilenos con la intención de dar a conocer nuestra lucha, pero también de afianzar aquel sentimiento de unidad latinoamericana muchas veces difícil de practicar en nuestro país, pero que en momentos como estos es tan necesario y parece salir a flote de manera natural, al reconocer en tantos estudiantes aquella convicción de que la lucha que hoy estamos dando en Chile, mañana podría darse en cualquier otro país hermano, y no dudo que en la medida de su justeza nosotros estaremos apoyándolos de manera recíproca.

19 nov 2011

¿Qué es la pobreza?


Escrito por Linda Colón Reyes/ Prensa Comunitaria

En la época que vivimos muchos han perdido la esperanza de ver su vida cambiar, otros han observado como su condición de vida empeora. El desempleo se esparce, el gobierno despide miles de personas y miles radican la quiebra al no poder pagar sus deudas, en otras palabras ingresan al grupo de los pobres.

Es indudable que la palabra pobreza tiene una carga emocional e ideológica muy grande. Durante siglos se ha hecho referencia la misma, bien sea para plantear la desgracia de su existencia o para justificar su necesidad. Todas las sociedades a lo largo de la historia coinciden en que la pobreza es una calamidad, un infortunio para quienes la sufren. En lo que difieren las diversas posturas es en torno a cómo solucionarla y en sobre quienes recae la responsabilidad de su existencia. Para algunos la pobreza es un castigo de Dios o de la naturaleza, un mal eterno que siempre ha existido y existirá. Para otros es el fruto de la ignorancia, de los prejuicios, del egoísmo y de la riqueza acumulada y el afán de lucro de unos pocos a expensas de otros. Hay quienes la conciben como un castigo de una sociedad injusta, como un pecado social, moralmente condenable o como la consecuencia de la vagancia y la falta de interés de quienes prefieren vivir del gobierno. En síntesis, la pobreza es una realidad creada por el ser humano y de éstos depende también su persistencia o erradicación.

El concepto pobreza se ha utilizado tradicionalmente para referirse a una condición o situación económica, política y social desigual que afecta a ciertos individuos en la sociedad. Consiste en carecer de lo necesario y lo  deseado o lo valorado por otros. Ser pobre representa la carencia de los medios de subsistencia capaces de proveer lo que  una sociedad históricamente determinada considera adecuado y necesario para un nivel de vida comúnmente aceptado. Pero ¿qué es lo adecuado, lo necesario o lo comúnmente aceptado? Tales preguntas no son fáciles de contestar porque las respuestas pasan por numerosos filtros valorativos, ideológicos y de clase. Las respuestas están igualmente saturadas por la construcción de utopías y alternativas que diferentes sectores de la sociedad quieren creer que “resuelven” el problema de la pobreza, pero siempre desde la perspectiva de sus intereses e ideales.

Al referirnos a la desigualdad social, política y económica no necesariamente estamos hablando de pobreza, pero sí es evidente que ésta surge de la primera. La pobreza implica la existencia de desigualdad social y económica en la posesión de la propiedad, de la renta, del poder político y de la vida en general. Incluye con toda probabilidad, el sometimiento a una relación de dependencia e inferioridad. Presupone también, y muy probablemente, el vivir del socorro del prójimo y experimentar la necesidad de la ayuda de otros. La desigualdad no se experimenta individualmente y no se reduce a un sentimiento de inferioridad; la desigualdad es una suerte común que se experimenta colectivamente. Presupone la existencia de unos estratos sociales que poseen riquezas y de otros estratos que pueden definirse por la carencia total o relativa de estos bienes. Implica también la mirada excluyente, prejuiciada y a veces despectiva del otro; y la mirada interna temerosa, protegida y a veces también excluyente del otro.

En la pobreza se viven diferentes niveles de carencia como lo son la escasez de recursos, bienes y oportunidades que limitan el desarrollo óptimo del ser humano. En este sentido se distinguen dos niveles de pobreza: absoluta y relativa. Su forma más opresiva es la pobreza absoluta, que se define como aquella condición en la que la privación de los bienes materiales (alimento, vestimenta, vivienda, medicinas) pone en peligro la sobrevivencia del individuo. Este nivel de pobreza es conocido como pauperismo e implica, en la mayor parte de los casos, inanición y muerte por la carencia absoluta de alimentos, albergue, medicamentos o vestimenta. En el mundo de hoy, esta pobreza implica la incapacidad “absoluta” de acceso al mercado de bienes de consumo. Sus ejemplos más dramáticos los encontramos en algunos países donde la hambruna y la total escasez de los factores más elementales para mantenerse vivos, provoca la muerte diaria de miles de personas, como lo es en el caso de Etiopía, Bangladesh y en América, el caso de Haití.

La noción de pobreza encierra también un carácter relativo, que puede definirla como una condición individual, familiar y nacional basada en la privación de bienes materiales, el bajo ingreso y el escaso acceso al bienestar social en general. Se es pobre y se carece materialmente en comparación con otros sectores que sí poseen diversos niveles de riqueza. La pobreza vista desde una perspectiva relativa, nos obliga a la comparación no sólo con aquellos que poseen menos, sino sobre todo con aquellos que poseen más. En tal sentido la pobreza, como antónimo de la riqueza, hace referencia en todas las épocas al poder y el privilegio que acompañan a la riqueza y, por tanto, al desamparo, a la desigualdad social y a la inferioridad que son cónsonas con esta. Las definiciones relativas, suelen comparar los ingresos, el acceso a los bienes y servicios de los pobres con quienes no lo son y se enfoca en la brecha de ingresos que separa a estos dos grupos.

La pobreza es un fenómeno social producido por los seres humanos y no un hecho natural. Es fruto de un desarrollo contradictorio y desigual por el cual los ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres. La pobreza implica opresión, dependencia, injusticia y es, por tanto, un hecho generado y mantenido por unas estructuras, por lo que no es posible resolverla sin trabajar con esas estructuras. Es una condición que se define con respecto a una variedad de factores cuantitativos y cualitativos, que cambian a medida que lo hacen los tiempos, las sociedades y las culturas.

La pobreza tiene, además, unas implicaciones cotidianas que difícilmente pueden ser entendidas por aquellos que no la han padecido nunca. Supone privación y carencias en comparación con quienes gozan de una condición de vida más desahogada. Aunque lo más evidente de la pobreza es la carencia material, ésta también implica otras privaciones en el campo educativo, en lo cultural, en lo ocupacional, en lo emocional y en el aspecto del poder político. Desde la perspectiva del desarrollo humano, la pobreza significa  la privación de escoger y la ausencia de oportunidades para vivir una vida  digna y tolerable.

La pobreza también lleva aparejado un problema de falta de poder político y en muchos de los casos, del interés por hacerlo valer. Aunque en los países del Tercer Mundo los sectores pobres constituyen la masa votante, en la mayor parte de los casos hay una exclusión de dichos sectores de las esferas del poder político. Igualmente, conocer y hacer valer los derechos es una tarea muy difícil para los pobres. Desde esta perspectiva, los pobres son ciudadanos de segunda clase para quienes la democracia se define de manera diferente. Sin embargo, ello no significa carencia absoluta de poder porque los pobres hacen valer sus derechos organizándose, protestando y llevando a cabo demostraciones, en muchas ocasiones de manera espontánea y en otras ocasiones manejados por quienes tienen el poder. Hay situaciones, en que los pobres toman el poder en sus manos (como cuando invaden terrenos, hacen demostraciones contra el alza de precios o contra la contaminación de sus comunidades, etc.)  y entonces  el conflicto con el Estado y sus estructuras es muchas veces inevitable.

El problema del poder nos lleva a plantear el asunto de la democracia y la igualdad en el seno de la sociedad. Uno de los dogmas de fe de nuestra sociedad es que todos somos iguales. Desde la Declaración de los Derechos del Hombre de la Revolución Francesa, hemos escuchado hablar de la libertad, la democracia y la igualdad. Ésta última se ha planteado como paridad de derechos frente al Estado, pero también se ha planteado como reclamo  frente  a la falta de poderes reales y a la distribución desigual de recursos. Si de algo pueden dar fe los pobres y marginados es de la falta de igualdad cuando de reclamar derechos o defenderse frente a los tribunales de justicia y las demás instituciones sociales se trata. En la pobreza la subordinación ante la falta de igualdad es cosa de todos los días.El reconocimiento de los derechos, tanto por parte de las agencias del orden (policía, tribunales), como por parte de los que sufren la desigualdad, es en la mayor parte de los casos inadecuado. La existencia formal del derecho a la igualdad no obliga  en forma alguna a su cumplimiento.

La pobreza en nuestros días conlleva diversas formas de segregación social y racial: los pobres estudian en escuelas para pobres, viven en barrios para pobres, asisten a hospitales, tribunales y hasta iglesias para pobres. De esta forma, la pobreza alude a condiciones de falta de igualdad y trato discriminatorio en la vida cotidiana. La existencia de la igualdad formal, es igualdad ante la ley y no excluye la existencia de leyes desiguales e injustas. Es por esta razón que las acciones de los grupos que luchan por mayor igualdad van encaminadas a exigir del Estado y de los partidos políticos la extensión de los recursos y las condiciones necesarias para el disfrute de la igualdad social y económica.

Suenan los tambores de guerra contra la República Islámica de Irán


Escrito por Alejandro Torres-Rivera / MINH

Informes provenientes de Israel que fueran circulados la pasada semana, señalan que el Primer Ministro de este país, Benjamín Netanyahu, y su Ministro de las Fuerzas Armadas estarían procurando la autorización del parlamento israelí para una operación militar preventiva de Israel contra la República Islámica de Irán.

El objetivo, según se indica, sería destruir las instalaciones de ese país vinculadas con su programa nuclear y dedicadas a enriquecer uranio. De acuerdo con Israel y sus socios occidentales, el actual programa nuclear iraní no es otra cosa que la antesala a un programa más abarcador cuyo propósito es el desarrollo de la capacidad militar nuclear en este país de Asia Central.

Desde el punto de vista de Israel, Irán ha desarrollado sistemas balísticos de largo alcance cuyas ojivas convencionales podrían golpear el territorio israelí. Tales misiles y sus ojivas podrían, en la eventualidad de que Irán desarrolle armas nucleares, transportar las mismas representando una amenaza nuclear contra el Estado judío. Toda esta línea de argumentación contra Irán, sin embargo, se produce en un contexto en el cual desde hace décadas, Israel ha sido señalado como país que posee armas nucleares con las cuales estaría dispuesto a enfrentar cualquier situación de peligro que represente un ataque contra su territorio por parte de un Estado extranjero.

Durante la existencia del régimen de Apartheid en Suráfrica, Israel fue uno de los Estados solidarios con dicho régimen racista. Puso a su disposición armamento nuclear dirigido a preservar su existencia, armamento este que Suráfrica llegó a considerar dentro de la intervención de este país contra Angola y el territorio que hoy ocupa Namibia.

Concluida la campaña militar de la Unión Europea y Estados Unidos contra Libia bajo la OTAN, ambas potencias económicas y políticas comienzan a enfilar sus colmillos contra otros estados musulmanes. Los principales objetivos a corto plazo son Siria e Irán. En el primero de estos países, desde hace meses se ha venido estructurando un proceso de desestabilización interna que hoy ha conllevado miles de muertos en enfrentamientos entre civiles armados y fuerzas de seguridad. Dentro del proceso dirigido al derrocamiento del gobierno legítimo del presidente Assad, la Unión Europea, Estados Unidos y la OTAN han contribuido a la organización de un gobierno provisional en el exilio, localizado en Turquía; a la creación de un ejército compuesto básicamente por varios miles de desertores de las fuerzas armadas sirias, ubicados en la frontera norte del lado de Turquía; el aislamiento diplomático y económico mediante sanciones impuestas por estos países y más recientemente por la Liga Árabe; y la subvención de grupos de oposición al interior del país.

Otro de los objetivos inmediatos de Estados Unidos, la Unión Europea e Israel en la región lo constituye la República Islámica de Irán. Contra este país durante los pasados años se han venido ensayando las mismas medidas que hemos descrito en el caso de Siria, aunque con menor éxito. La razón es sencilla. Irán es un país con mayores capacidades militares, mayor población, territorio mucho más extenso, recursos naturales importantes, y finalmente, mayor organización política y cohesión ideológica que Siria.

Si bien cualquier intención de llevar a cabo una agresión contra este país supone enfrentar un enemigo diferente, con una mayor capacidad de respuesta que la que puede tener en estos momentos Siria, lo cierto es que la estrategia seguida hoy contra Siria está directamente vinculada con la eventual estrategia de Estados Unidos, la Unión Europea  e Israel contra Irán.

Dentro de la incertidumbre que provoca una acción militar de Israel contra la República Islámica de Irán, hace apenas una semana, como consecuencia de una gran explosión masiva en un depósito de municiones localizado en Teherán, capital de Irán, fue destruida una instalación militar que albergaba el arsenal de misiles Shahab. Este tipo de armamento, fabricados por Irán, cuenta con un alcance que permitiría un ataque contra Israel. De acuerdo con  informaciones suministradas por el gobierno iraní, la explosión se produjo  mientras personal militar transportaba municiones. Sin embargo, informes procedentes de Occidente, indican que fue el resultado de un operativo de sabotaje llevado a cabo por la Mossad, agencia de inteligencia de Israel. En este atentado falleció un alto oficial de las fuerzas armadas iraníes, el General Hasan Moghaddam, figura clave en el desarrollo del programa de misiles iraníes.

La explosión tiene lugar en momentos en que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) divulgara un Informe en el cual plantea nuevas preocupaciones en torno a las “posibles dimensiones militares” del programa militar iraní. Simultáneamente con la publicación del Informe, cual si fuera un coro previamente ensayado, tanto el Presidente Obama como voceros del Reino Unido expresaron que no descartarían una operación militar directa contra Irán.

Mientras al presidente de Estados Unidos le han salido al paso algunos precandidatos electorales, acusándole de blandenguería con Irán y de haber abandonado a Israel, Obama ha respondido indicando que Estados Unidos no descarta ninguna opción.

Ciertamente, la presencia de armas nucleares por diferentes Estados representa un peligro para la sobrevivencia misma de la Humanidad. Sin embargo, a la hora de determinar el derecho de cada país a tenerlas, la alternativa no puede ser el privilegio de unos países sobre otros.

Fidel Castro, en una de sus recientes Reflexiones, nos dice que grandes pensadores en el mundo hoy concluyen que el estallido de 100 armas nucleares estratégicas sería suficiente para “poner fin a la existencia humana en el planeta.” Continúa diciendo que el número oficial de países con armas nucleares en el mundo son ocho, de los cuales cinco forman parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, a saber: Estados Unidos, Rusia, China, Reino Unido, Francia. Los otros dos, Paquistán e India, reconocen poseer las mismas y en efecto han realizado pruebas de éstas.

En el caso de Israel, que nunca ha reconocido oficialmente poseer dicho tipo armamento, se calcula que tiene entre 200 a 500 armas de esta clase.

Fidel documenta, además, distintas acciones militares realizadas por Israel en el pasado, dirigidas contra instalaciones de algunos países de la región que desarrollaban con fines civiles la tecnología nuclear, como fueron los casos del reactor nuclear iraquí en Osirak en 1981, o del reactor sirio Dayr az-Zawr en 2007. Por eso indica, no tendría nada extraño que en estos momentos Israel se proponga llevar a cabo el mismo proceder del pasado contra Irán.

La pregunta es, más allá de los riesgos que pueda representar para la Humanidad la carrera armamentista nuclear, ¿en qué descansa el derecho de unos países a poseer este tipo de armamento e imposición, o la falta de derecho en otros a así desarrollarlas?

Hasta el presente, en medio de los nuevos tambores de guerra de Occidente e Israel contra la República Islámica de Irán, países como la Federación Rusa han manifestado su disposición a hacer lo que esté a su alcance para evitar el uso de una opción militar contra Irán. Tal acción, por cierto, no dejaría de ser una clara provocación para Rusia dentro del marco de sus relaciones económicas, políticas y geográficas con Irán.

Irán posee una alta capacidad militar. Incluye no solo fuerzas de tierra y aire, sino también fuerzas navales. Su disciplina y disposición a la defensa del país quedó demostrada cuando todavía Irán no poseía la capacidad militar que hoy tiene, como quedó evidenciada en la guerra apoyada y estimulada por Estados Unidos por parte de Iraq en la década de 1980.

El inicio de una agresión de Israel, de Estados Unidos y de la Unión Europea contra Irán tiene el potencial real de desatar una guerra de consecuencias impredecibles en la región de Asia Central. Una guerra así, ciertamente impactaría las poblaciones de toda Europa, la región de Asia Central y Medio Oriente. Sus olas expansivas ciertamente llegarían a nuestro Hemisferio. Las consecuencias materiales y en vidas humanas que un conflicto de esta naturaleza acarrearía no lo merece el género humano.

Es hoy un momento oportuno de oponernos a una nueva escalada en la guerra imperialista por el control de las riquezas de los países del Medio Oriente y Asia Central. Todo cuando hagamos hoy contribuirá a evitar un nuevo conflicto armado en el cual, tarde o temprano, nuestra juventud será arrastrada al mismo.

16 de noviembre de 2011

Mitos y verdades sobre el descubrimiento


Escrito por Diego Gil Mortola/80grados

A pocos días de celebrarse un nuevo aniversario del descubrimiento de Puerto Rico, entrevistamos al profesor Francisco Moscoso, historiador quien desenmascarará algunos mitos sobre la fecha del descubrimiento de Puerto Rico, el rol de Cristóbal Colón y la supuesta pasividad de los taínos.

Decía Napoleón que la historia no es más que la fábula de los vencedores. Quizás por eso tengamos una visión de la historia que no concuerda con la realidad, a veces mitificada o modificada a conveniencia. Cuando se le preguntó a Francisco Moscoso sobre la fecha del descubrimiento de Puerto Rico, no dudó en contestarla: “No es real que Puerto Rico haya sido descubierto el 19 de noviembre de 1493 en el segundo viaje de Colón. Su verdadero descubrimiento sucedió el 3 de enero de 1493, en el primer viaje”.

La historia oficial cuenta que Colón partió desde el Puerto de Palos el 3 de agosto de 1492, en busca de una ruta hacia oriente que en aquel momento se denominaba “las indias”. Las primera isla a las que arribó se denominaba Guanahani y formaba parte de lo que hoy es una de las Bahamas. Para ese entonces fue bautizada como San Salvador. Allí se produce el primer encuentro entre los dos mundos en términos pacíficos, mediante algunos gestos y ademanes, sus habitantes le enseñan a Colón que existen otras islas que poseían lo que el navegante más famoso de la historia buscaba: oro. Poco tiempo después, el 27 de octubre, Colón arribó a las costas de lo que hoy es Camagüey (Cuba) a la que le dio en sus memorias una soberbia descripción: “La tierra más hermosa que mis ojos hayan visto”. Pero el “Gran Almirante”, impaciente por encontrar oro, izó velas el 12 de diciembre, y pasando por la Punta de Maisí, descubrió La Española (República Dominicana y Haití). Al llegar a lo que hoy es Santo Domingo, la carabela Santa María encayó, y con sus restos hicieron el “Fuerte de la Navidad”, que se denominó así porque precisamente ese día tuvo el desperfecto, y dejando 40 marinos a su cargo, debido a que en las otras dos barcas no había lugar para todos, Colón y Pinzón retornaron a España, llevando consigo a algunos taínos.

Sobre esta parte de la historia Moscoso difiere: “Lo que ocurrió es que Martín Alonso Pinzón zarpó a Puerto Rico sin el consentimiento de Colón, llegó a la isla el 3 de enero de 1493 y se convirtió en el verdadero descubridor de Puerto Rico. Posteriormente llegó a España antes que él y murió al mes de su regreso bajo causas misteriosas, pero su paso por Borinken quedó documentado por el propio Colón en una de sus cartas mientras volvía a Europa”, explica el profesor de Historia, una de cuyas especialidades es precisamente esta época histórica.

Pero, ¿por qué Pinzón moriría bajo causas misteriosas? ¿Quién habría hecho algo contra él? ¿No habrá sido el “Gran Almirante”, el autor intelectual de algún asesinato? Veamos que tiene que decir el profesor Moscoso: “A Colón hay que situarlo en su contexto histórico. En Puerto Rico y en Estados Unidos la imagen que se tiene de él es la de un gran marino, heroico, que cruzó el Océano Atlántico con tres carabelitas. Eso es cierto pero forma parte de una de las tres personalidades que el poseía; también era un burgués mercante y era un conquistador y colonizador”.

Colón había nacido en Génova, era hijo de un artesano textil. Para la época se habían producido grandes avances en la navegación que permitían la expansión ultramarina. Entre otros, la brújula y el astrolabio, así como también en la cartografía con el desarrollo de mapas.  Portugal, que era el centro marítimo de navegación más importante del mundo para aquel entonces, ya había iniciado su expansión ultramarina hacia el oeste de África, lo que impidió que el viaje hacia las indias despertara la atención de los portugueses. Pero pronto despierta la atención de los españoles, que acababan de rendir a los musulmanes en Granada. ¿Qué ocurriría con los territorios que fueran conquistados por Colón? Sería virrey de todos los territorios conquistados o descubiertos, obtendría el 10 % de todas las mercaderías vendidas a España y sería el juez de todos los pleitos comerciales que se produjeran en su zona de virreinato. “Con esto se evidencia otra faceta de Cristóbal Colón, la del comerciante y conquistador/colonizador ”, sostuvo Moscoso.

La conquista y colonización de los taínos que habitaban Puerto Rico no parece haber sido un hueso fácil de roer para los españoles.

“Colón y los demás tripulantes desde el primer viaje vinieron completamente armados y la diferencia de armas era abismal. Los taínos estaban en la era neolítica, tenían arco y flecha, lanzas, no mucho más”, agregó el historiador. En el diario que Colón escribe a los reyes dice: “Créanme que estas islas son de fácil conquista, pueden sentirlas suyas como Castilla (..) sus habitantes no tienen armas y están desnudos y huyeron al vernos sin que se les intentaramos hacer daño alguno”.

Sin embargo, Cristóbal Colón solamente pudo estar tres o cuatro días  para abastecerse en su segundo viaje en Puerto Rico, en lo que hoy se lo conoce como Aguada o Aguadilla. Posteriormente continuó hasta la isla Española para saber qué suerte habían corrido los cuarenta tripulantes que había dejado. La conquista de la isla Española se produce recién en 1505, un año antes de su muerte y recién ahí, es cuando los españoles deciden poner a Puerto Rico en su radar.

“Al principio la relación de los taínos con los españoles era pacífica, en buenos términos, pero cuando vieron que se apoderaban de sus recursos y que cambiaba su estilo de vida los taínos decidieron alzarse contra los españoles. Empezaron a pelear en 1511 y los españoles tardaron cuatro años en conquistar la isla, recién en 1515 la dominaron completamente, incluso para el año 1517 todavía existían algunos focos de resistencia”, puntualizó Moscoso.

Para ese entonces, Puerto Rico tenía 44 caciques en aldeas de 1,000 a 5,000 hombres cada una, lo que da un estimado de una población de 110,000 habitantes. Su capital, donde vivía Agüeybana el viejo, el cacique más poderoso estaba al suroeste de la isla, lo que hoy se conoce como Guánica. “La civilización taína, si bien no tiene comparación en cuanto a desarrollo con los aztecas o los incas ya estaba organizada políticamente, se daban los primeros pasos de una estratificación social. La existencia de caciques demuestra que estaban en un punto intermedio entre las grandes civilizaciones indígenas y las que apenas eran sociedades tribales”, explicó el profesor.

Desde la conquista de Puerto Rico en 1515, ya no habría vuelta atrás para los taínos y comienzan a desaparecer. “A partir de 1530”, continúa Moscoso, “comienzan a traer esclavos de África para remplazar a los taínos como fuerza laboral y en la década siguiente estos ya serían la mayoría debido al mestizaje y las muertes ocurridas por guerras, epidemias como sarampión y viruela y explotación por parte de los invasores . También se perdían muchos embarazos porque las mujeres aún embarazadas las obligaban a  trabajar en la mina”.

¿Cómo debemos recordar a Colón?, preguntamos.

“Ante todo debemos dejar de mitificar la historia y analizarla de una manera más racional, por otra parte hay ignorancia por parte de los historiadores que poseen una información deficiente. También existen hispanófilos como nuestro primer historiador Salvador Brau que apoyaron la conquista española por razones políticas”.

Debe recordarse lo siguiente: “Hasta 1898 la educación estaba dominada por el gobierno español, ni siquiera se nos permitió tener una universidad. Después eso estuvo dominado por los americanos, Paul Miller escribió nuestra historia, desde una visión hispanófila ajustada al modelo americano”.

Para finalizar le preguntamos cuándo cree que el 3 de enero se celebrará “el día del descubrimiento de Puerto Rico”, y  contundente respondió: “Cuando escribamos nuestra propia historia”.

18 nov 2011

El Instituto Hostosiano de Educación Política exige la pronta excarcelación de Enrique Flores Lanza


18 de noviembre, 2011

Comunicado del InHEP

San Juan, Puerto Rico - El Instituto Hostosiano de Educación Política condena enérgicamente el injusto encarcelamiento que el Tribunal de la Dictadura de Honduras le ha impuesto al el exministro Enrique Flores Lanza y exigimos la pronta excarcelación del patriota hondureño.

Flores Lanza es un preso político al que se le ha privado de su libertad desde hace cinco meses. En la carta con fecha del 15 de noviembre de 2011, que ha divulgado el Frente Nacional de Resistencia Popular en su página de internet, Flores Lanza dijo:

 “Hoy se cumplen cinco meses desde que me fueron impuestas arbitrarias medidas cautelares que me mantienen privado de libertad, y que, además, amenazan con ser el argumento para mi traslado súbito a la penitenciaría nacional, donde nadie es capaz de garantizar mi vida”

Además añadió:

“A pesar de nuestros constantes llamados al cumplimiento del Acuerdo de Reconciliación Nacional, suscrito en Cartagena en mayo anterior, diversos voceros del gobierno se burlan una y otra vez de la voluntad de nuestro pueblo de darle una oportunidad a la paz y al diálogo. No entendemos si el presidente Lobo Sosa, ignora las declaraciones de funcionarios judiciales, del Ministerio Público, del Congreso Nacional, y otras instituciones. Lo cierto es que estamos convencidos de que es tiempo de que el presidente Lobo Sosa aclare públicamente si este Acuerdo es solo una expresión personal de buena voluntad, o fue suscrito por el Presidente de Honduras”.

Hacemos un llamado a todas las organizaciones puertorriqueñas y a todos ciudadanos de de buena voluntad a repudiar este hecho criminal que ha cometido la dictadura contra exministro Enrique Flores Lanza. Flores Lanza es miembro del heroico Frente Nacional de Resistencia Popular. Por la presente queremos expresar nuestra solidaridad y simpatías a la lucha del que lleva a cabo el Frente Nacional de Resistencia Popular.


Carta de Ex Ministro Enrique Flores Lanza a 5 meses de prision‏


Tegucigalpa, 15 de noviembre de 2011


Compañeros y compañeras
Partido Libertad y Refundación
Pueblo de Honduras
Pueblos del Mundo

Hoy se cumplen cinco meses desde que me fueron impuestas arbitrarias medidas cautelares que me mantienen privado de libertad, y que, además, amenazan con ser el argumento para mi traslado súbito a la penitenciaría nacional, donde nadie es capaz de garantizar mi vida. Desde la última vez que escribí, sucedieron muchas cosas, pero el sistema que me avasalla con sus descabellados argumentos sigue vigente, determinado e impune. Puedo afirmar que las cosas, tanto para mí, como para mi familia y para mi pueblo se han deteriorado muchísimo en los últimos treinta días.

A pesar de nuestros constantes llamados al cumplimiento del Acuerdo de Reconciliación Nacional, suscrito en Cartagena en mayo anterior, diversos voceros del gobierno se burlan una y otra vez de la voluntad de nuestro pueblo de darle una oportunidad a la paz y al dialogo. No entendemos si el presidente Lobo Sosa, ignora las declaraciones de funcionarios judiciales, del Ministerio Público, del Congreso Nacional, y otras instituciones. Lo cierto es que estamos convencidos de que es tiempo de que el presidente Lobo Sosa aclare públicamente si este Acuerdo es solo una expresión personal de buena voluntad, o fue suscrito por el Presidente de Honduras. Aquí queda una tarea para los periodistas acuciosos y responsables de nuestra patria, yo no puedo hacer la pregunta desde mi prisión.

El Coordinador General del Frente Nacional de Resistencia Popular, hizo llegar una misiva al Presidente Lobo Sosa hace casi dos meses; en ella se volvía a plantear un llamado al dialogo verdadero y franco para reconciliar la familia hondureña. Ninguna respuesta salió de la Casa de Gobierno, ni siquiera se escuchó referencia a la misma en ninguna de las intervenciones del jefe de Gobierno. Nos preguntamos entonces, si su constante discurso de respeto a los derechos humanos no es más que palabrería para llenar huecos en sus alocuciones públicas. Esta es otra tarea para quienes alguna vez tienen la oportunidad de ser escuchados por el señor presidente.

A pesar de todo el cumulo de absurdos a los que nos enfrentamos día a día, hemos seguido el camino de la construcción de una alternativa de poder para el pueblo, que ante el juego letal de la oligarquía, condena desde ya a muerte al bipartidismo, compuesto por partidos tradicionales que hicieron de la miseria y el dolor de las mayorías una constante histórica. Me siento orgulloso de ser parte de este momento en la historia de Honduras, y, en medio del sacrificio de cientos y de miles de hombres y mujeres libres, yo aporto un grano de arena, aun cargando el difícil peso del cautiverio y la incertidumbre que se cierne contra mi integridad física. Me llena un sentido de agradecimiento con la vida, por dejarme ser parte de esta gesta de nuestro pueblo que muchos, incluso su clase política,creyeron condenado para siempre a la oscuridad y a la esclavitud; por ser parte de tantos seres humanos que hoy iluminan con su convicción revolucionaria la senda hacia la libertad.

Nuestro partido Libertad y Refundación LIBRE, verdadero partido del pueblo, se yergue victorioso, sorteando los valladares que le separan del poder de la república, paso fundamental para impulsar la refundación de Honduras;proceso del que soy parte con disciplina y entusiasmo, cumpliendo mis deberes desde la reclusión que nos quita movilidad, pero que ni limita nuestras facultades, ni cercena nuestros principios y convicciones. Si la idea es humillarnos para que demos la espalda al proceso revolucionario que vive nuestra tierra, fallaron, han fallado cada uno de los ciento cincuenta días que me han retenido ilegalmente, ya deberían entender que los procesos históricos no los detienen ni los caprichos ni los intereses mezquinos de unos cuantos, y que su única salida digna es dejar que me defienda en libertad, bajo la presunción de inocencia que indican las leyes de nuestro país.

Como todo ser humano temo perder la vida por la mano ensangrentada de una clase dominante obsoleta, agotada y derrotada; pero mi temor esta en dejar mi familia, porque entiendo el dolor que produce la pérdida de un ser querido, de ningún modo temo sacrificar mi existencia por el triunfo de nuestra lucha. Sé que cualquier atrocidad de este tipo que se le ocurriera a uno de los cientos de sicarios que pululan en todas las instituciones del Estado a partir del golpe de Estado de junio de 2009, solamente será un elemento detonante de una situación inestable e insostenible. Lo admita el gobierno de Porfirio Lobo Sosa o no, lo acepte el Estado y sus mal llamados operadores de justicia, yo soy un prisionero político; mi delito esta en mi consciencia, en oponerme a seguir el juego de los que mancharon todo sentido de decencia que haya tenido alguna vez en nuestra Honduras.

Hoy estoy más firme que nunca, mi espíritu más LIBRE que nunca, convencido de que en HONDURAS LA REVOLUCION ES INEVITABLE; y de que nuestro pueblo ha iniciado su marcha a la libertad y ya nada lo detendrá. Hagan lo que hagan, no nos detendrán, y cada día que pasa mi prisión los condena más a ellos y nos absuelve a nosotros.

¡Hasta la victoria siempre!

Enrique Flores Lanza
Miembro Comisión Política
Frente Nacional de Resistencia Popular
Partido Libertad y Refundación

17 nov 2011

¿Crisis terminal del capitalismo?


Escrito por Leonardo Boff/ Alai-amlatina

Vengo sosteniendo que la crisis actual del capitalismo es más que coyuntural y estructural. Es terminal. ¿Ha llegado el final del genio del capitalismo para adaptarse siempre a cualquier circunstancia? Soy consciente de que pocas personas sostienen esta tesis. Dos razones, sin embargo, me llevan a esta interpretación.

La primera es la siguiente: la crisis es terminal porque todos nosotros, pero particularmente el capitalismo, nos hemos saltado los límites de la Tierra. Hemos ocupado, depredando, todo el planeta, deshaciendo su sutil equilibrio y agotando sus bienes y servicios hasta el punto de que no consigue reponer por su cuenta lo que le han secuestrado. Ya a mediados del siglo XIX Karl Marx escribía proféticamente que la tendencia del capital iba en dirección a destruir sus dos fuentes de riqueza y de reproducción: la naturaleza y el trabajo. Es lo que está ocurriendo.

La naturaleza efectivamente se encuentra sometida a un gran estrés, como nunca antes lo estuvo, por lo menos en el último siglo, sin contar las 15 grandes diezmaciones que conoció a lo largo de su historia de más de cuatro mil millones de años. Los fenómenos extremos verificables en todas las regiones y los cambios climáticos, que tienden a un calentamiento global creciente, hablan a favor de la tesis de Marx. ¿Sin naturaleza cómo va a reproducirse el capitalismo? Ha dado con un límite insuperable.

Él capitalismo precariza o prescinde del trabajo. Existe gran desarrollo sin trabajo. El aparato productivo informatizado y robotizado produce más y mejor, con casi ningún trabajo. La consecuencia directa es el desempleo estructural.

Millones de personas no van a ingresar nunca jamás en el mundo del trabajo, ni siquiera como ejército de reserva. El trabajo, de depender del capital, ha pasado a prescindir de él. En España el desempleo alcanza al 20% de la población general, y al 40% de los jóvenes. En Portugal al 12% del país, y al 30% entre los jóvenes. Esto significa una grave crisis social, como la que asola en este momento a Grecia. Se sacrifica a toda la sociedad en nombre de una economía, hecha no para atender las demandas humanas sino para pagar la deuda con los bancos y con el sistema financiero. Marx tiene razón: el trabajo explotado ya no es fuente de riqueza. Lo es la máquina.

La segunda razón está ligada a la crisis humanitaria que el capitalismo está generando. Antes estaba limitada a los países periféricos. Hoy es global y ha alcanzado a los países centrales. No se puede resolver la cuestión económica desmontando la sociedad. Las víctimas, entrelazas por nuevas avenidas de comunicación, resisten, se rebelan y amenazan el orden vigente. Cada vez más personas, especialmente jóvenes, no aceptan la lógica perversa de la economía política capitalista: la dictadura de las finanzas que, vía mercado, somete los Estados a sus intereses, y el rentabilismo de los capitales especulativos que circulan de unas bolsas a otras obteniendo ganancias sin producir absolutamente nada a no ser más dinero para sus rentistas.

Fue el capital mismo el que creó el veneno es el que lo puede matar: al exigir a los trabajadores una formación técnica cada vez mejor para estar a la altura del crecimiento acelerado y de la mayor competitividad, creó involuntariamente personas que piensan. Éstas, lentamente van descubriendo la perversidad del sistema que despelleja a las personas en nombre de una acumulación meramente material, que se muestra sin corazón al exigir más y más eficiencia, hasta el punto de llevar a los trabajadores a un estrés profundo, a la desesperación, y en algunos casos, al suicidio, como ocurre en varios países, y también en Brasil.

Las calles de varios países europeos y árabes, los “indignados” que llenan las plazas de España y de Grecia son expresión de una rebelión contra el sistema político vigente a remolque del mercado y de la lógica del capital. Los jóvenes españoles gritan: «no es una crisis, es un robo». Los ladrones están afincados en Wall Street, en el FMI y en el Banco Central Europeo, es decir, son los sumos sacerdotes del capital globalizado y explotador.

Al agravarse la crisis crecerán en todo el mundo las multitudes que no aguanten más las consecuencias de la superexplotación de sus vidas y de la vida de la Tierra y se rebelen contra este sistema económico que ahora agoniza, no por envejecimiento, sino por la fuerza del veneno y de las contradicciones que ha creado, castigando a la Madre Tierra y afligiendo la vida de sus hijos e hijas.

*Leonardo Boff es Teólogo / Filósofo y autor de “Proteger a Terra-cuidar da vida: como evitar o fim do mund”, Record 2010.